Una mujer con la personalidad de la princesa Diana, es difícil encontrar, su sonrisa auténtica y su transparencia ante la sociedad, la hicieron blanco de múltiples críticas dentro de la monarquía británica, en particular de su suegra, la reina Isabel II, ya que nunca fue "santo de su devoción" y sin embargo Diana dejó un gran recuerdo en todo el mundo y la sociedad británica de los 80 y principios de los 90.
Apegada siempre a lo que sentía, Diana, una mujer muy sensible que atravesó una dura infancia debido al divorcio inminente de sus padres y el abandono de su madre cuando Diana tan sólo tenía 5 años, fue algo que marcó su vida para siempre, que le valieron desde numerosas crisis de ansiedad, intentos de suicidio y cerca de 20 años de terapias psicológicas que ayudaron a que la princesa de Gales tuviera una vida más plena.
Diana, la princesa muy querida por todos, su carisma y belleza cautivaron al pueblo inglés, sin embargo la prensa mediática y los medios en general, ejercieron sobre ella un importante peso en su vida diaria, algo muy común de la monarquía es ser blanco de críticas, sin embargo la reina Isabel II no permitiría que su nuera fuera quién fue, una mujer transgresora y de calidad humana muy alta que no se compara hoy en día con ningún miembro de la realeza, incluidos sus hijos, William y Harry.
Se dice que su matrimonio fue un mero arreglo por parte de la que porta la corona inglesa, sin embargo, Diana siempre mostró sus sentimientos a flor de piel sin importar nada, sin respetar los estrictos protocolos ni las críticas de la sociedad, era una mujer como cualquier otra, es por ello que tenía gran empatía y conexión con el pueblo británico y todos sus más sinceros admiradores.
Una de las bodas más importantes de todos los tiempos fue el 29 de julio de 1981, en la que Lady Di y el príncipe Carlos unieran sus vidas para formar una bella familia de ensueño, sin embargo, días antes a esta importante ceremonia la princesa de Gales asistió a un partido de polo en Hampshire, al que asistieron cientos de personas y múltiples fotógrafos que capturaron el triste momento en el que Diana no pudiera reprimir más sus sentimientos y se soltara en llanto.
En el documental 'Lady Diana, la mujer con el matrimonio equivocado' aseguran que la princesa comenzó a darse cuenta de que su matrimonio sería tan solo una ilusión ya que siempre fue advertida sobre las señales de que el príncipe Carlos tenía fama de ser un hombre infiel, a lo que Diana soltaba a llorar las veces que podía sin importar que fuera en público.
Además, expertos en la realeza e imagen pública han señalado que ésta incomodidad previa al matrimonio, también se dejó ver en cuando los "novios" anunciaron su compromiso públicamente en televisión, el más abrumado era el príncipe Carlos que estbaa preocupado sobre las preguntas sobre sus sentimientos sobre Diana, por que sabía que Camila estaría viendo la televisión y sin duda no quería decir que estaba "enamorado" de Diana.
Con información de Vanitatis
avh