Amalia Andrade creció temiendo que Pablo Escobar entrara en su casa o que la guerrilla colombiana la secuestrara, como muchas de las niñas que crecieron en el Cali de los 90.
Éste y muchos otros miedos son descritos en Cosas que piensas cuando te muerdes las uñas, un manual ilustrado que explica el temor, cómo se adueña de las personas y las persigue.
Después de reírse del desamor en Uno siempre cambia al amor de su vida (por otro amor o por otra vida), con el que se convirtió en un fenómeno editorial y de las redes sociales, la colombiana espera repetir la hazaña.
Andrade afirmó que las mujeres son sus principales lectoras, pero los hombres también tienen el corazón roto y muchos miedos. "No se les permite temer ni sufrir", como lo corroboró durante su investigación previa.
El miedo es una prisión, pero gracias a este libro, sus seguidores han logrado enfrentarlos.
A una chica, sus amigos se lo regalaron mientras estaba internada por intento de suicidio”.A la misma Amalia le ha ayudado a entender su ansiedad y depresión. Una de las razones por la que decidió escribirlo es la falta de información que hay sobre la salud mental, “el estigma es tan grande que lo único que puedes leer son artículos light”. Las personas que sufren de algún padecimiento mental, pueden llegar a sentirse aisladas, "no sabes si estás loca, sola, si te vas a morir, es confuso". “Luché en silencio la enfermedad conmigo misma porque no la aceptaba", dijo. Amalia supo que no estaba sola cuando encontró a otra ilustradora que padece de ansiedad, "me salvó la vida, me di cuenta que no estaba sola. Hablarlo hace la mitad del trabajo”. Cosas que piensas es una guía para el ansioso y para sus amigos. “Somos tan ignorantes al respecto, que no se trata con seriedad”. Es educación para ambos lados, que viene de la investigación y de la vivencia de la propia autora. Escribir su segundo libro le generaba miedo, sobre todo después de las repercusiones que tuvo el primero. Cuando era niña, le resonó una frase de Shakira: "Te mentiría si te dijera que estoy sorprendida con mi éxito". Las mujeres tienen que pedir perdón y se sienten apenadas, mientras que los hombres se espera que sean exitosos.
Me ha sorprendido mi éxito por la dimensión; por otro lado, trabajé mucho. Sabía que tenía un producto bueno en las manos".Andrade reconoció que se está viviendo un cambio de paradigmas con respecto al trabajo de las mujeres, “tenemos más presencia y las historias que escribimos tienen más relevancia. Qué ridículo que sea 2018 y tengamos que decir esto, pero es verdad”. "Somos una generación que ya no tiene tanto miedo". Hay valentía atrás de dibujar, porqué el mundo te dice que es de niños y que te mueres de hambre, pero Andrade aseguró que "aquí estamos y aquí nos quedamos". POR MELISSA MORENO